Era la tarde de un sábado
lleno de sol, una cita a ciegas, un encuentro ocasional, Francisco era un
hombre alto de más o menos, un metro ochenta y algo más, blanco, cabello
ondulado color cenizo, más o menos de unos 45 años, quizá un poco más, ni gordo
ni flaco, un hombre bien parecido, con su cara redonda como el sol, Rocío, pensó
a sus adentros, “que hombre tan simpático, tiene porte de príncipe”, siempre le
han gustado los hombres altos y bien parecidos, pero no había tenido la
oportunidad de conocer un hombre como este, saludaron con un beso como si se conocieran hace mucho tiempo, existió química desde el primer momento en que sus
ojos se miraron por primera vez. Roció era
una mujer, blanca de cabello negro largo rizado, más o menos de unos 43 años o
un poco más, ojos grandes y expresivos, blanca, simpática, para su edad no es
gorda, tiene una gran sonrisa que ilumina su rostro.
Después de entablar
conversación, invito a Roció a comer, y mientras comían le contaba de su vida,
a que se dedica, ella lo escuchaba con mucha atención mientras comía, la
primera cita fue algo mágico, ella estaba como hipnotizada, y el la miraba con
mucho interés, era como si ya se
conocían, quizá en otro tiempo o en
algún otro lugar, la tarde transcurrió
entre risas y conversación se estaban conociendo, el sol empezó a esconderse, dando paso a una
hermosa luna llena, estas dos almas gemelas habían vivido experiencias
parecidas con respecto a sus parejas anteriores y se sentían muy identificadas,
sus parejas los habían maltratado tanto física como psicológicamente y esta
situación hizo que se unieran aún más,
paseaban en el auto, por los alrededores de la ciudad, de pronto el semáforo, los detuvo frente a un hotel, Francisco tomo la mano de Roció con cariño y le pregunto si quería pasar
la noche con él. Roció lo miro, con una
sonrisa en su rostro y acento con la cabeza, el auto dio vuela y entraron al
lugar, la habitación era grande, como
esas de película, tenía un espejo en el techo y una mecedora muy coqueta, la televisión estaba colgada en la pared, y
debajo de esta había una mesita que tenía colas, licores, golosinas y muchas
cosas más, la cama enorme como una gran piscina que se movía al contacto, una cama de agua la habitación muy bien decorada, el baño era grande y tenia un jacuzzi color crema, el aroma era a jazmín.
Roció estaba muy nerviosa y no
sabía qué hacer, entonces él, la tomo por
la cintura y empezó a besarle, era demasiado increíble para ser realidad, pero
ahí estaba en sus brazos, existía un aroma de flores que envolvía toda la
habitación, era un hombre muy delicado, apasionado y cariñoso, hicieron el
amor, y fue genial. Prendieron el jacuzzi se metieron el agua estaba muy buena y empezó a salir burbujas, también tenia luces de colores que se prendían y apagaban como árbol de navidad, todo un espectáculo.............. Era la primera vez
que Roció, hacia algo así tan loco, apenas lo conocía y ya estaba en sus
brazos, y así amanecieron en aquel lugar amándose toda la noche.
El reloj daban las ocho de
la mañana, a lo lejos se escuchaba el sonar de campanas de una iglesia que
anunciaba el empezar de la misa.
Francisco despertó con el sonido y miro a su lado estaba Rocío dormida,
acaricio sus cabellos rizados y le dio un beso.
Ella despertó sonrío y
correspondió al beso, de repente se dio
cuenta donde estaba dio un salto de la
cama.
Diciendo...... ¡Dios mío qué hora
es!
¡Mi madre debe estar muy
preocupada no llegue a dormir en toda la noche……….......
Francisco la abraza con
ternura, está asustada como una niña que hizo una travesura y mama la va a
regañar. Ella se viste con mucho afán
quiere salir corriendo.
Él la tranquiliza................................
Vamos a desayunar compramos pan y leche para
que lleves, así tu madre y tus hijos no estarán enojados por no pasar
la noche en casa.
Gracias vamos dijo ella…..,.
Salieron del lugar y se
dirigieron a la plaza donde había varios restaurantes abiertos, bajaron del auto, tomados de la mano como dos
adolescentes enamorados, entraron a un restaurante, que olía a pan fresco y
café recién colado, el aroma era envolvente y delicioso. Desayunaron mirándose a los ojos, y de rato en
rato se tomaban de la mano y se daban besos, chocaban sus tazas brindando por
haberse conocido y haber disfrutado una noche tan apasionada.
Salieron del restaurante y se despidieron con
un fuerte abrazo y un beso muy apasionado.
Francisco al ver como ella se
alejaba pensaba………
Qué su encuentro casual había sido mucho mejor
de lo que esperaba, tenían muchas cosas en común, no se parecía en nada a
Esther su anterior pareja, que por todo hacia problema y lo celaba hasta con su
propia sombra, solía ir a su trabajo, inventando que todas las mujeres que con
el trabajaban eras sus amantes, realmente era un gran dolor de cabeza………..
En cambio Rocío eran tranquila,
serena, inspiraba confianza y sus vidas tenían muchas cosas en común, era como si se conocieran de siempre, sus gustos, su
manera de ver el mundo, para dos
personas que un día antes no sabía nada la una de la otra.
Las semanas siguientes siguieron
saliendo, a comer, a pasear, una tarde la llevo a su departamento, en el tercer
piso de unos multi-familiares muy bonitos, era pequeño y acogedor, tomo la
guitarra en sus manos y empezó a tocar, es un músico genial toca la guitarra y
entona música clásica, huaaaauuu también canto canciones de Piero, por cierto
canta igual que Piero, y Roció estaba embelesada escuchándolo……
Roció es una mujer dulce,
cariñosa que sueña encontrar un hombre, con quien compartir sus gustos, sus intereses, que le dé un fuerte abrazo cuando
las cosas salen mal, un poco de comprensión, y Francisco sin darse cuenta eso
le estaba ofrecido, llevan ya cuatro meses saliendo, y cada vez se comprenden
mejor.
Han viajado juntos por varias ciudades y pueblitos se los ve felices tomados de la mano, jugando, corriendo, que hermoso es poder encontrar almas gemelas que compartan y sean felices juntas.
FIN
MORALEJA: El amor esta en todas las personas, lo importante es saber a quien se entrega ese amor, no es una noche loca de pasión, es algo mas grande de compatibilidad, comprensión, conocimiento de la persona............................................
